Eventos
Después de la exitosa
actuación del señor Barroso en La Sala, nos complace obsequiaros con otra
página de su cómic, y, cómo no, con una nueva entrega de su libro.
El Gran
Libro de Autoayuda del Señor Barroso.
-40-
Terapias alternativas
Y si alguien quiere pruebas
científicas, un psicólogo francés, Michel Gauquelin, efectuó un estudio
estadístico que confirmaba que la hora y fecha del nacimiento de una persona
tenía una influencia notable en su posterior profesión. El hecho de que estos
datos estuvieran hábilmente manipulados es una mera anécdota que no hace más
que confirmar su convicción de que estaba en lo cierto.
El tarot es una baraja de naipes,
y qué tiene que ver con los planetas es lo que nos preguntamos todos, pero si
pagas por una consulta te suelen regalar una carta astral, por lo que me imagino
que la astrología es al tarot lo que los muñequitos de las películas de
animación a la hamburguesa de Mac Donalds.
No conseguiremos que estos
generadores de vaticinios favorezcan una mejora de nuestra aura si no somos
capaces de realizar pequeños sacrificios.
Educaremos cuerpo y mente
para lograr estar despiertos a altas horas de la noche. Sentado en el sofá
frente a tu pantalla de LCD, largo tiempo después del crepúsculo, presiona con
suma delicadeza el botón On del mando a distancia e inicia un placentero
zapping. Puede sucederte que durante esa maniobra te encuentres con el canal de
teletienda y notes que tus dedos no te obedecen; ¡ve inmediatamente al capítulo
Compulsiones! Logrado pasar con elegancia este escollo, continúa hasta
conectar con una frecuencia en la que emitan tarot televisivo, si antes de
cinco minutos comienzas a notar un implacable efecto hipnótico y unas ganas
insoportables de llamar al número que sale en la pantalla no tienes remedio,
pero si tu cerebro está preparado para soportar esta tremenda presión, aguanta
hasta el momento mágico en que entra una llamada en directo en el plató y lo
que dice el cliente es casi ininteligible, por lo que mientras pregunta sobre
un tema la pitonisa le responde sobre otro, dando como resultado que le augura
el futuro con datos totalmente erróneos. Cuando te duelan las mandíbulas de
tanto carcajearte, es tu momento. Marca el teléfono de la adivina y espera con
paciencia, cuando te pasen con ella pregúntale por lo que te va a suceder
mañana, es probable que te haga ciertas preguntas como cuál es tu nombre o tu
fecha de nacimiento, respóndele con un inocente “adivínalo” o “mira a ver que
dicen las cartas” hasta que te cuelgue. Te habrás gastado unos eurillos, pero
si ponderas la diversión recibida, la relación calidad-precio es excelente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario